Crema de chirimoya

La chirimoya es una fruta exquisita que se luce en esta suave crema. Combine la pulpa de chirimoya con leche condensada y gelatina, disfrute de esta delicia que deleitará su paladar. Una auténtica joya culinaria inspirada en la generosidad de la naturaleza. Simple y deliciosa.

La cremosa y dulce Crema de chirimoya resulta un postre perfecto para compartir en familia.

Su textura suave y sabor delicado la convierten en una opción ideal para cualquier ocasión especial.

Su preparación, aunque sencilla, requiere de un poco de paciencia para lograr el punto perfecto de consistencia.

Anímense a probar esta exquisita receta y disfruten de su delicioso resultado en cada cucharada.

Crema de chirimoya

Reposteria
1 hora
4 Porciones

Ingredientes

750 gramos de Pulpa de chirimoya

1 taza de Azúcar

1 lata de Leche condensada

1 taza de Agua

3 Sobres de gelatina sin sabor

Preparación

Paso 1 : Para preparar esta deliciosa receta, es importante comenzar refrigerando la leche condensada por unas horas.

Paso 2 : Luego, se debe procesar la pulpa de chirimoya junto con el azúcar.

Paso 3 : En paralelo, en una taza de agua tibia hay que preparar la gelatina sin sabor.

Paso 4 : El siguiente paso consiste en calentar la gelatina en una cacerola sin que llegue a hervir, con el objetivo de disolver los posibles grumos que puedan quedar.

Paso 5 : Una vez lista la gelatina, se toma la leche condensada y se bate durante 3 a 5 minutos.

Paso 6 : Posteriormente, se mezcla la pulpa de chirimoya con la leche condensada y, por último, se incorpora la gelatina, removiendo constantemente hasta lograr una consistencia homogénea.

Paso 7 : La mezcla resultante se vierte en un molde de aluminio o silicona y se lleva a la nevera para refrigerar.

Paso 8 : Una vez que la preparación esté firme, ¡estará lista para disfrutar!