Verde es la palabra que usan los ecuatorianos para referirse indistintamente a los plátanos, los tropicales frutos que lideran las exportaciones agrícolas y que han convertido a Ecuador en el mayor exportador del mundo. Así pues, además de ser un alimento crucial en la dieta diaria, es un importante motor de la economía ecuatoriana.
¿Cuál es el origen del verde?
El verde es una planta tropical de la familia de las musáceas, uno de los progenitores de la banana. Originariamente es de Australasia, pero se cultiva en más de 130 países, desde el sudeste asiático de donde son nativas y crecen naturalmente, hasta Oceanía y Sudamérica. El principal productor mundial de verde es India, donde se cultiva casi un cuarto de los frutos comercializados en el mundo, aunque buena parte de los mismos son para consumo doméstico. El principal exportador es Ecuador: según el Instituto de Promoción de Exportaciones e Inversiones ProEcuador, el 30% de todos los plátanos que se vende en el mundo proviene de Ecuador, especialmente de la región costera de Manabí. El volumen de producción de plátanos sólo es superado por el trigo, el arroz y el maíz. La producción continua del fruto a lo largo del año los hace especialmente valiosos como alimento en la época de cosecha en los países tropicales, son los plátanos macho los que cumplen este papel principalmente.
Su cultivo requiere suelos fértiles, ligeramente ácidos o neutros, prefiere un suelo más denso y menos arenoso, y tolera mucho mejor la sequía. No tolera la sal. Prefiere el sol pleno, aunque soporta la semisombra. De acuerdo las condiciones climáticas, puede crecer hasta los 2.000 metros sobre el nivel del mar. Hoy la inmensa mayoría de los ejemplares plantados para obtener este fruto proceden de la variedad obtenida por el cruce de musa acuminata y musa balbisiana, pero esta última se cultiva aún en las islas japonesas Ryukyu, traída desde China o las Filipinas, por la fibra textil obtenida de sus hojas, llamada ito-basho.
El más inmaduro de todos los plátanos
De color verde o café, el plátano macho es la segunda variedad que más exporta Ecuador. Su pulpa tiene menos agua (por eso es más duro) y no es tan dulce, por lo que se usa mucho como acompañamiento (muchas veces reemplaza a la papa). El verde es un fruto con forma lineal de 7 a 15 cm de largo y hasta 4 de diámetro, que forma un racimo compacto. Está cubierta por una corteza verde en el ejemplar inmaduro (y amarillo intenso al madurar). El extremo se estrecha abruptamente hacia soporte delgado de 1 a 2 cms. La pulpa es blanca, rica en almidón y dulce. Los puntos negros que motean la pulpa son el resto de los óvulos no desarrollados. Las semillas son negras, globosas o irregulares, con la superficie rugosa, de hasta 6x5mm de tamaño, y están incrustadas en la pulpa. A mayor cantidad de semillas, el verde se hace de mayor tamaño.
La infinita versatilidad del verde
El plátano macho debe cocinarse antes de comer debido a que su mayor aporte es en almidón, lo que convierte al verde indigesto cuando está crudo; sin embargo, son muchísimas las formas de cocinar el verde: se asa, se hierve, se hornea, se fríe, se cuece, con piel, sin piel… se sirve como bocado o como acompañamiento. Las hojas del plátano macho se utilizan para envolver distintas carnes, como pescados o pollo, otorgando un delicado sabor cítrico y forman alrededor de la carne en un líquido gelatinoso y viscoso. Esta costumbre se utiliza desde las épocas ancestrales para proteger los alimentos del uso directo del fuego. Las hojas del plátano se dejan marchitar sobre una barbacoa o plancha hasta que tome color verde oscuro, luego se corta por la nervadura central y las hojas están listas para envolver los distintos alimentos. Con el verde se prepara muchísimas recetas típicas del ecuador como los chifles, patacones, bolón, empanadas, tortillas, majado, repe lojano, etc…
En Ecuador, ¡el verde nunca falta en la mesa!